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viernes, 13 de julio de 2012

Un zombie se ha comido mis deberes

Noche del 2 al 3 de junio 2012

Julio Iglesias es mi profesor y se pasea por la clase cantando. Mi prima también está allí y nos queremos ir. Tiro algo al suelo para despistar y cuando no nos mira nadie cojo a mi prima de la mano y nos vamos corriendo. No encontramos la salida por ningún lado. 

Por fin salimos y mi prima me dice que se va a quedar en casa de Nines a pasar unos días (en el sueño vive en Seseña). Yo le digo que es mejor que se quede en mi casa porque está más cerca del colegio. Me dice que se lo pensará pero que aún así nos podemos ver en clase. Yo quiero que se quede conmigo porque verla en clase me parece poco, me apetece estar más tiempo con ella. 
Aunque se lo va a pensar, vamos a Seseña porque
quiere comprarse algunos complementos de vestir. 
Vamos al trabajo de Nines pero nos dicen sus compañeros que es su día libre. Aun así nos quedamos un rato. Es una oficina con dos filas de escritorios con sus teléfonos y ordenadores correspondientes. Todo está lleno de plantas y una de las paredes es un ventanal. Desde allí se puede ver que estamos en un piso muy alto. 
Cojo un teléfono y llamo a un número que me invento en el momento. Mi prima dice que le gusta mucho el trabajo de Nines porque puede levantarse a por un café cuando ella quiera. 
Estoy en una montaña rusa (no recuerdo si estoy subida o al lado) y hablo con una chica de comprar lotería entre las dos. Hay más gente y se me ocurre que podemos comprar el cupón entre más personas para que salga más barato aún. Se ríen de mí porque es imposible jugar varias personas con el mismo cupón ya que según ellos: "Sólo se puede hacer una apuesta por persona". Yo me doy cuenta de la tontería que he dicho y me río también. 
Vivo en un chalet y los zombies rodean la casa. Al final mi prima se ha venido conmigo. Me dice que hubiera sido mejor ir donde Nines ya que su casa está más alta. Yo le digo que eso es peor porque es más difícil escapar y además su puerta es de una madera muy mala y la podrían romper fácilmente. 
Mi puerta también es muy blanda y está en muy mal estado así que pienso que la tendré que apuntalar. Lo único que tengo a mano son unos taburetes y los tumbo para atrancar la puerta pero no me valen porque no son lo suficientemente largos. En un momento de extrema desesperación arranco de cuajo una puerta para apuntalar la otra. Mi prima alucina con mi fuerza y no se explica cómo he podido hacerlo. 
A pesar de esto, un zombie consigue entrar, por lo que cojo uno de los taburetes y le clavo una pata en la cabeza. Aparece otro y le estrello la cabeza contra un ventanal. Después me parece una mala idea porque los otros zombies pueden ver ese agujero y hacerlo más grande para entrar. 
Mientras, Miriam me escribe un sms preguntándome si ya estoy llegando a su casa. Me estreso porque por culpa de los zombies voy a llegar tarde. 
.................... 
Voy a casa de mi abuela. Allí está ella con mi perra Nukka y un Husky Siberiano hembra. Esta última es muy cariñosa con las personas pero muy agresiva con mi perra. Me da miedo que le muerda así que echo a mi perra al pasillo y cierro la puerta. Me da mucha pena verla fuera aunque una vez ahí cambia su carácter sumiso y ladra al Husky. 
De repente a mi abuela le pasa algo. Creo que se desmaya pero no lo recuerdo bien.

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